LA CONCERTACION PERDIO POR PALIZA EN GRAL ROCA
GOLPE DE KO EN EL PATIO DE CASA Y PARECE QUE COMENZÓ LA CUENTA....
Esta parece ser la realidad de la Concertación en la provincia, o por lo menos de la estrategia que se eligió sin tener en cuenta el pensamiento de la gente. Es más que evidente que más allá de lo previsible de la derrota en Roca, lo que no funciona y es rechazado por el electorado es la recurrencia a sistemas y formas de elección partidarias que concluyen en candidatos y dirigentes que el electorado ya no quiere votar más. Cuando debe optar entre similares candidatos, opta por quien puede demostrar que ha hecho algo y está decidido a castigar a los demás, a limpiar y pasar el cedazo que las estructuras, la partidocracia reinante no está dispuesta a realizar.-
Tengo la impresión que al momento de votar, ni siquiera se está analizando si el candidato ha sido buen dirigente o no, si su trabajo ha pasado desapercibido o no o si ha sido un becado político o no. Se analiza únicamente el hecho que hace más de veinte años que mudan de un cargo a otro, sirviendo para todo o para lo que esté disponible, siempre bajo el salario del estado y con resultados las más de las veces, insatisfactorio para el ciudadano común. Si analizamos los últimos resultados electorales, veremos que ésta es una suposición muy probable y realista, de la que escapa y por ser excepción justamente, el propio gobernador.-
Ahora ¿porqué ni siquiera se percibe desde los propios partidos que ignotos candidatos para la mayoría, fundados sólo en su prestigio personal o su trayectoria, aparecen con votaciones importantes cuando no se polarizan las elecciónes? No lo sé. Existe un divorcio en la interpretación de la realidad que realizan los dirigentes y la que hace el ciudadano sobre todo aquel independiente que no se ve obligado a navegar en dos aguas por su militancia. Y este divorcio, parte del concepto iniciático que de la política se tiene en uno y otro lugar.-
Para unos es una carrera, una profesión donde se evoluciona y asciende fundado en lealtades y compromisos traducidos en la capacidad de motorizar voluntades a favor que permiten la futura ubicación. Situación que se hizo propicia desde la aparición del clientelismo que asegura, premiando el compromiso a cambio de tolerar la vagancia incluso, una buena cantidad de votos o un piso desde el que se parte.-
Y para los demás, no constituye para nada todo eso y desprecian sus formas y consecuencias. Las posiciones son irreconciliables pero a favor de la primera está el dominio de los partidos o sus sellos y para la segunda se cuenta con la enorme mayoría de electores que suele contradecir abiertamente, lo que se resuelve partidariamente desde la primera. Me parece entonces, que no es correcto hablar de nueva política ni siquiera en el discurso. No es ése el problema o la forma de encararlo que tiene el ciudadano común, que cada vez es más determinante en la elección de quien quiere que lo guíe por un período de tiempo. Éste en realidad está votando políticos nuevos cuando puede, incluso con políticas viejas si se quiere y prefiere cambiar y elige el que mejores resultados produjo, cuando no tiene más remedio ante una polarización ¿se entiende?
No veo ni me han convencido hasta hora que exista otra razón para que buenos, honestos y capaces candidatos, no sean alternativa suficiente ante otros y pierdan por paliza. No por mil quinientos votos eh... por palizas que no resisten ninguna excusa, aún cuando las vamos a leer y nos van a tratar de convencer que lo que fue en realidad no es ¿no?
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